ELLES CANTEN, ELLES PARLEN * TONI CASTARNADO *


    Presentación del libro ELLAS CANTAN, ELLAS HABLAN , . Toni Castarnado , su autor ha abierto el ciclo de presentación por algunas de las bibliotecas mas populares de Barcelona en la Biblioteca del Poble Sec , aqui teneis una breve reseña de como ha ido el acto. MYRYAM SWANSON, acompañada a la guitarra por Riki Frouchtman nos ha ilustrado con su background impresionante presentado bajo el título , Underground a ritme de Rock'n' Roll . Una master class sin duda para ampliar conocimientos acerca de la cantante barcelonesa polifacética como demuestra en sus diferentes grupos frontwoman de los diferentes estilos que le gustan y domina , sin duda. 
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Patti Smith, Ronnie Spector, Rosalía, Rocío Márquez, Maria del Mar Bonet o Courtney Barnett son algunas de las 101 mujeres que han pasado ante la grabadora del periodista colomense Toni Castarnado, quien ha reunido ese variopinto cúmulo de entrevistas en “Ellas cantan, ellas hablan” (Sílex, 19), su último libro. Lo cierto es que Castarnado se está especializando, al menos en el ámbito editor, por glosar el rol de la mujer en el mundo de la música popular. Pero si sus dos anteriores libros giraron en torno a discos (“Mujer y música. 144 discos que avalan esta relación”, de 2011; y “Mujeres y música. 144 discos más que avalan esta relación”, de 2014; ambos publicados por 66 RPM), este supone un jugoso complemento por cuando se centra en las vivencias, contadas de primera mano por un puñado de mujeres adscritas a múltiples estilos, de la música de raíz norteamericana al flamenco, pasando por la canción de autor, el soul o el blues. Entre ellas, hay más de treinta entrevistas exclusivas. El resto fueron rescatadas de sus colaboraciones en distintos medios a lo largo de las últimas dos décadas.

El lanzamiento del libro ha propiciado también un ciclo de charlas y actuaciones, a modo de presentación, que pasará por distintas bibliotecas públicas de Barcelona a lo largo del mes de marzo. Arranca hoy, lunes 4, en la Biblioteca Francesc Boix de Poble-sec con Myriam Swanson. Aquí puedes ver los detalles del ciclo.

Queda bastante claro que te gusta plantear las entrevistas como conversaciones. Incluso diría que eres de aquellos periodistas que necesitan dar su punto de vista sobre determinados temas sobre la marcha, para sacarle más jugo al entrevistado, aunque eso contravenga cierta idea de neutralidad, ¿no?
Totalmente. De hecho muchas veces se confunden las cosas. Me dicen que creo empatía. Pero no es eso lo que busco. De una entrevista en la que no hay empatía con el entrevistado también se generan conversaciones interesantes. En el libro hay algunas en las que no había una especial conexión ni química con la entrevistada, pero hay un toma y daca que te permite ir saltando de temas. Para mí, una buena entrevista es una buena conversación. También lo es aquella en la que tú le sacas al entrevistado la información que te interesa recabar. Y es muy diferente una entrevista promocional a otra que no lo es. Hay varios perfiles de entrevista. Y en este libro hay algunas de archivo que he ido haciendo con los años –muchas de promoción pura y dura–, en las que también busco la conversación (hay veces que es imposible), y otras que son exclusivas, treinta y cuatro en total en este libro, en las que sí que he buscado que me hablen un poco de todo, como ocurre con las de Martirio, Maria del Mar Bonet, Núria Graham o Leonor Watling. Pero sí, me gusta generar ese punto de estar como tomando un café, como si estuvieras con alguien que podría ser tu amigo.

Te confieso que me daba cierta pereza enfrentarme a un rosario de entrevistas en el que una de las preguntas se repitiera, de forma casi obligada: el papel de la mujer en la industria. Y puedo haber sido víctima de mis propios prejuicios, porque el elenco de respuestas que nutren es libro es de lo más variopinto, nada homogéneo. Más de lo que esperaba: desde Alba Molina, que se muestra más que escéptica ante el feminismo, hasta Joana Serrat, que está en contra de las cuotas de género, pasando por Alejandra Ribera, que hace una disección brillante y tremendamente lúcida sobre el asunto, o Laura Marling, quien directemente te dice que no se siente cómoda hablando de ese asunto con un hombre…
Bueno, igual esperabas que todas cayeran en el mismo tópico. Mira Sole Giménez, por ejemplo, que me dijo que le da miedo que esta nueva corriente feminista se convierta en una moda. Sí que es verdad que hay muchos puntos de vista, y al abanico es muy amplio.

¿Te sorprendió que fuera así?
Sí, sí que me sorprendió. Es verdad que es una pregunta que durante años he ido formulando siempre, aunque más en el sentido de cómo ven ellas la evolución de la mujer dentro de la música desde que la entrevistada comenzó hasta ahora, que es una pregunta más común. El ocho de marzo del año pasado sí que me ha dado la oportunidad de preguntarles cómo vivieron ese día. Y ahí sí que te encuentras respuestas de todo tipo. Tanto las que tenían un punto de vista crítico respecto a la posición de la mujer en este negocio como las que opinaban a un nivel más social. La de Alejandra Ribera la hice por email, precisamente, y tal cual me llegó me pareció brillante. Es importante que haya opiniones de todo tipo para al final llegar a consensos. Y es importante que el abanico abarque desde gente mayor que ya tiene su carrera hecha y ya no han de demostrar nada, hasta mujeres más jóvenes. Desde Joana Serrat, quien como decías está en contra de las cuotas, hasta Lucy Rose, que te cuenta los problemas que se encuentra cuando llega a una sala de conciertos. También hay gente que se posiciona de una manera más neutra, como Nina de Juan, que es escueta pero contundente. Está bien que haya varios elementos de juicio.

“Me parecía importante que, aparte de los cuatro o cinco casos más conocidos, se reconociera el trabajo de muchas otras mujeres que no tuvieron las trascendencia que merecían“
¿No te produce una sensación agridulce que tus tres últimos libros (como los de Anabel Vélez o el más reciente de Miguel Ángel Bargueño) surjan precisamente de un desequilibrio que es injusto? Es obvio que ninguno de nosotros se va a hacer rico escribiendo libros sobre música, pero sí te generan presencia mediática y un lógico orgullo, porque no es fácil completar un libro. Pero podría llegar un tiempo en el que la igualdad fuera real (o casi real) y ya no tuvieran sentido libros como el tuyo. ¿No crees?
Me parece fantástica la pregunta. Cuando publiqué mi primer libro, “Mujer y música: 144 discos que avalan esta relación”, en 2011, siempre decía que ojalá en un futuro esta clase de libros no tuvieran sentido. En aquel momento yo lo planteé como reivindicación del trabajo femenino en la música. Creí que estaría bien dar voz a muchas mujeres que durante muchos años habían luchado por hacerse un hueco en esta industria, y quería simplemente hablar de sus discos. Porque me parecía importante que, aparte de los cuatro o cinco casos más conocidos, los de Patti Smith, Chrissie Hynde, Madonna o Debbie Harry, se reconociera el trabajo de muchas otras mujeres que no tuvieron las trascendencia que merecían. Era mostrar un catálogo de discos importantes ya no solo desde un ámbito mainstream sino también desde un terreno más desconocido. Discos que tenían algo que contar, y además me gustaban. En el caso de este nuevo libro, viendo todo lo que se estaba generando con el nuevo impulso feminista, todo surge a raíz de tres o cuatro entrevistas seguidas que encadeno para varios medios (desde Sílvia Pérez Cruz a Rosalía, pasando por Rocío Márquez) en las que me doy cuenta de que me están contando cosas muy interesantes, sobre las que creo que ahora ellas pueden ejercer como un altavoz. Y qué mejor altavoz que las propias mújeres que hacen música. Sobre todo a raíz de la de Rocío Márquez, que me hizo planteamientos muy interesantes. Ahí me dije, ¿y por qué no un libro de entrevistas con todo el material que tengo? Pero no me surge de una manera muy preconcebida. De hecho, fue Alfonso Cardenal, de la SER, quien me planteó la idea. Me animé, aunque la verdad es que eso me cuesta poco, y como tenía mucho material de archivo de veinte años haciendo entrevistas, lo creí interesante. Pero sí que creo que mis dos anteriores libros en un futuro no tendrían que ser necesarios, más allá de su condición de guía de consulta. Sin más objeto que ese. Este es un libro de testimonios. Pero sí es verdad que puede llegar un día en el que no tenga sentido que ni yo ni otra gente aborde esto, porque debería estar asumido por la sociedad. Seguramente llegue, porque sí que están llegando cambios, como la paridad en algunos carteles, muy evidente en el caso del Primavera Sound, por ejemplo. Espero que así sea.

En el libro surgen personajes recurrentes, sobre todo en las respuestas, que serían como secundarios que aparecen con frecuencia, tanto masculinos como femeninos: es el caso Patti Smith, que era previsible (además de que también sale entrevistada), pero también de T-Bone Burnett o Tom Waits. ¿Te sorprendió o te sirvió para trazar algunos rasgos comunes?
El caso de Patti Smith es obvio, pero fijate que más que citarla a ella, las mujeres entrevistadas citan mucho su libro “Éramos unos niños”, que es como algo que empuja a muchas a seguir en esto de la música. Un libro que puede ser de mucha ayuda en un momento de fragilidad. Es como una guía espiritual para muchas mujeres que se dedican a la música, y creo que eso es fabuloso. En el caso de T-Bone Burnett, simplemente coincide que ha producido a muchas mujeres y es un tipo que deja huella. Ocurre con Alison Krauss o Imelda May. Todas enfatizan lo cómodo que les resulta trabajar con él. Y Tom Waits es debilidad personal, y sin quererlo, sale. Aparece en el caso de Leonor Watling o de Rickie Lee Jones, pero también es verdad que se da la circunstancia de que fue pareja de Rickie Lee Jones y luego Leonor Watling tuvo la suerte de entrevistarle, y no pude resisirme a preguntarle. Para toda la generación de Rocío Márquez o Sílvia Pérez Cruz también es un músico importante, como un pequeño género en sí mismo.

Otra cuestión común es la brecha cultural entre España y otros países de su entorno. La eterna consideración que se tiene aquí de la cultura como algo de segunda división.
Esa comparación se da mucho con Francia, al ser vecinos. Allí se cuida muchísimo la cultura. Yo viajo allí mucho por temas personales y se siguen comprando discos y libros en pueblos y ciudades muy pequeñas, en las que hay tiendas donde tienes acceso a la cultura. Ahora ha salido una ley con la que se le van a dar 500 euros a cada joven menor de 18 años para los pueda emplear en trabajos culturales. Surge el tema con Francia, pero también con Suecia. Creo que es en la entrevista con Ana Alcayde, que cuenta cómo llega allí, descubre la nyckelharpa y se genera un vínculo con el país. Yo creo que en España la cultura siempre queda en un segundo plano, o tenemos cierto complejo de inferioridad, quizá por la dificultades que tienen los propios músicos para ganarse la vida. María Rodés, por ejemplo, es de quienes me comentan que tienen que hacer otras cosas porque esto no le da para vivir como sería deseable. En cierta manera, hay un empobrecimiento cultural. Aunque creo que eso va cambiando: no hay más que ver la cantidad de libros musicales que se editan, algo que seguramente estamos generando entre todos, entre escritores, periodistas y músicos. O el boom de los festivales: no los hay si no hay público. Todo eso también es cultura. Incluso el cine, que todavía va gente a las salas, aunque creo que deberían ir más. Hay más ventajas que nunca para ir al cine. A mí me gusta ir al menos una vez a la semana. También somos un país que cree que el de al lado lo hace todo mejor. Simplemente tenemos nuestro propio carácter, y los que estamos en el ámbito de la cultura tenemos una misión, por eso nos involucramos en charlas, actividades… pero ese complejo de inferioridad está ahí. También venimos de dónde venimos, a nivel de democracia, con años y décadas de retraso en muchos sentidos. Pero yo soy más de ver el vaso medio lleno que medio vacío. Hay que ser optimista.

INFO: MONDOSONORO MondoSonoro






























Myriam Swanson nació en Barcelona en 1978, y desde adolescente empezó su carrera en formaciones underground de la ciudad que la llevó a los estilos rhythm n’ blues y al rock n’ roll. Myriam es una cantante, compositora y performer que lleva en sus influencias a mitos como Etta James, Bessi Smith, Dina Washington o Ella Fitgerald. Su primera colaboración profesional fue en 1996 con el saxofonista y compositor Dani Nel•lo, que la llevaría a realizar multitud de proyectos entre 2003 y 2011 y la convirtió en una profesional camaleónica con una gran capacidad para el blues, el rhythm n’ blues, el jazz…

Reconocida como una artista sobresaliente en la ciudad condal, fue la voz principal del Taboo- Burlesque Nights de la Sala Apolo de Barcelona entre 2009 y 2011. Su pasión por el sonido rhythm n’ blues clásico lo combina con rock’n’ roll y música popular, creando temas propios en español e inglés.

La versatilidad y matices de su voz la han llevado a realizar proyectos con el guitarrista Cesc Pascual o Amadeu Casas, uno de los grandes nombres del blues del país, con el que actuó en el “Mas i Mas Festival” en el Palau de la Música presentando la preparación de su primer disco conjunto.

Myriam Swanson actualmente lidera tres proyectos de estilos distintos: Early Blues Mood con Amadeu Casas; Magnolia, un cuarteto de jazz mainstream con Francesc Capella y Anton Jarl y Flamingo Tours un quinteto de rhythm n’blues salvage con Jorge Rebenaque, Jordi Mena, Anton Jarl y Lere.

Además estará a cargo del Curso Intensivo de Canto, Blues: canciones y formas de cantarlas, que el Estudio de Técnica Vocal de Barcelona ofrece a partir de abril. También tiene en marcha el proyecto RAW TRAVELIN REBELS, en el que Raw Rebels y Myriam Swanson irán presentando anticipos del nuevo disco de FLAMINGO TOURS.



COLABORACIONES:
Durante su carrera profesional Myriam ha colaborado con músicos de gran variedad de estilos como Dani Nel•lo, con el colaboró en Dani Nel•lo& Myriam Swanson Quintet, Massa Soroll per a Shakespeare, Dani Nel•lo & Myriam Swanson with The Anxovy Allstars, la edición de 4 eps para el escritor Andreu Martin y la serie Asesinatos en clave de jazz, Mambo Jambo & Myriam Swanson y Taboo- Burlesque Nights; también colabora en 2009 con el guitarrista Jordi Mena (Bunbury); colabora actualmente con el también guitarrista reconocido Amadeu Casas; el cuarteto de jazz Magnolia con Francesc Capella y la banda FLAMINGO TOURS.

Podéis seguir a Myriam Swanson en Facebook aquí: www.facebook.com/myriam.swanson y en Twitter a través de @MyriamSwanson 

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